Plaza del Camino

El antiguo Portomarín estaba situado unos metros más abajo, a la orilla del Miño, antes de que este fuese embalsado. En los años 50, debido al proyecto del embalse de Belesar, y gracias a estar declarado Conjunto Histórico Artístico desde el año 1946, se decide reubicarlo para evitar su inundación.

Este trabajo se encarga a los arquitectos Pons Sorolla, que se encargará del traslado de los elementos artísticos y Moreno Lacasa, responsable del diseño de las nuevas viviendas.

En su proyecto, ambos arquitectos diseñan el nuevo Portomarín con un centro neurálgico, la Plaza Mayor (actual Praza do Camiño), en la que se dispondrán los principales elementos: Iglesia de San Juan, ayuntamiento y palacio del General Paredes. La fachada sur de la plaza se cierra con edificaciones con soportales adintelados, que albergan los comercios más destacados, las viviendas más acomodadas y los edificios de trascendencia civil.

Es esta la razón por la que vemos un urbanismo perfectamente organizado, al contrario de lo que suele ser habitual en villas históricas con complejos entramados de calles que se creaban en función del crecimiento del lugar, tal y como sucedía en el antiguo Portomarín.