Mirador de Cabodevila o Penedo do Bico
Este enclave mágico se encuentra rodeado por diversos lugares, que pueden transportarnos también a diferentes épocas.
Comenzando desde el extremo izquierdo, localizamos el Castro de la Virgen (conocido como Suvirxe, "bajo la virgen"). Continuando con el recorrido a la derecha, nos encontramos con el pueblo de Portomarín, trasladado a un lugar más alto en la década de 1960, tras ser anegado el antiguo con la construcción del embalse de Belesar.
A nuestros pies, cuando las aguas bajan, tenemos el antiguo pueblo de Ferreiroá, también inundado por el embalse. Se pueden observar todavía algunos de los muros que formaban parte de las viviendas.
Continuando el recorrido hacia la derecha, podremos ver cómo el río Loio desemboca en el Miño e intuir el trazado del Camino Francés a Santiago de Compostela.
Se acostumbraba llamar a este lugar Penedo do Bico. Hay una especie de cazoleta en la roca y, según cuenta la leyenda, en ella se vertía la sangre de los sacrificios a los dioses.
¡No te lo pierdas!
En este mirador termina la ruta de senderismo PR-G 249, la cual discurre paralela al río Miño, deleitandonos con espectaculares vistas.