Iglesia de Santa María de Seteventos

La iglesia de Santa María de Seteventos es un buen ejemplo del románico rural gallego de finales del siglo XII y principios del XIII. Su origen, como el de muchas otras edificaciones religiosas de la zona, tendría relación con el monacato visigodo establecido en los valles del Miño y del Sil durante la Alta Edad Media. Las noticias más antiguas de esta iglesia datan del año 976 y la vinculan al monasterio de Diomondi.

Se trata de una iglesia de planta rectangular con una única nave cubierta de madera y de cabecera recta, habitual de los templos relacionados con la repoblación del norte peninsular. Conserva un arco triunfal sobre columnas de época románica, así como una portada que consta de dos parejas de columnas con capiteles decorados con motivos vegetales.

Su mayor valor reside en el conjunto de pinturas murales del siglo XVI que se encuentra en su interior y que decoran el arco triunfal de acceso a la capilla mayor, en el que se representan la Anunciación y el Juicio Final.